Calderas de aire caliente son dispositivos de calefacción utilizados en entornos industriales y comerciales para generar aire caliente. Estos dispositivos se utilizan generalmente con el objetivo de proporcionar eficiencia energética y economía en lugares donde se requiere calor de proceso o aire caliente.
Las calderas de aire caliente se dividen en dos categorías según el tipo de combustible: aquellas que utilizan combustibles sólidos (como carbón de lignito, cascaras de nueces, piñas de pino, pellets, etc.) y aquellas que utilizan combustibles líquidos o gaseosos.
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El principio básico de funcionamiento de las calderas de aire caliente implica la generación de aire caliente mediante la transferencia de la energía térmica liberada por la combustión del combustible (carbón, gas natural, aceite, etc.) al aire.
Este proceso ocurre a través de las superficies de transferencia de calor dentro de la caldera. Dependiendo del diseño de la caldera y su propósito, estas superficies de transferencia de calor pueden tener estructuras diferentes, como tubos, placas o rotores. La cámara de combustión y el sistema de admisión de aire son componentes importantes para el funcionamiento eficiente de las calderas de aire caliente.
Las calderas de aire caliente tienen una amplia variedad de aplicaciones y se utilizan para diversos propósitos en diferentes industrias. Algunas de las áreas de uso son las siguientes: